Abre tus sentidos y pon atención, porque se nos presenta un momento favorable para el encuentro con Jesucristo. Durante 40 días nos preparamos para la celebración más importante de todos los cristianos, la Pascua. El momento en el que el Hijo de Dios vence al mal, en el que la tiniebla se torna luz, en el instante en el que el Amor supera toda barrera y riega de esperanza hasta las esquinas más olvidadas de nuestro corazón.
Por eso, nos proponemos preparar con mucho mimo este momento, practicando la OLA. Aquí te damos algunas claves que te pueden servir de ayuda:
O de Oración. Si hay algo que nos hace ser especiales es la capacidad de poder Orar con nuestro Padre. Es un Obsequio, un regalo, poder depositar en Él todo nuestro ser, nuestras inquietudes, nuestros problemas, nuestros proyectos. Oblígate a parar y dedicarle un tiempo cada día.
L de limosna. Porque dar es reconocer que todos somos hermanos, que Dios Padre disfruta cuando ve que sus hijos se cuidan. Limosna es hacer realidad el milagro de los panes y los peces, cada día. Si no tienes dinero, o no tienes tiempo para dar, entonces revisa el punto siguiente.
A de ayuno. Porque vamos tan deprisa que se nos olvida que la vida pasa, y muchas veces, no solo pasa sino que sobrepasa. No dejes de ser el protagonista de tu propia vida. Revisa bien qué te distrae de ser auténtico, qué te separa de tus hermanos.
Esta cuaresma vamos a recibir a Dios con una gran OLA.